Elecciones en la Casa del Pueblo: apristas de la “vieja guardia o de la nueva guardia”
Al interior del Partido Aprista Peruano, se pone candente el debate sobre la renovación de cuadros diligénciales en el partido de la estrella, unos que plantean la presencia de nueva camada de apristas y otros que dicen que la edad no es importante, sino la capacidad.
El congreso del Partido Aprista Peruano, se desarrollará entre el 7, 8 y 9 de julio próximo, las discrepancias ya se hacen sentir sobre el control de la dirigencia aprista, un punto estratégico para lo que será las elecciones generales del 2021.
Par el secretario general de esa organización política, Omar Quesada, la renovación en la dirigencia del Partido Aprista Peruano debe incluir la presencia de “rostros nuevos”, preparados y dispuestos a recorrer el país.
“Eso tiene que ver no solo con los programas, sino con rostros nuevos en la política, el Apra tiene muchos jóvenes con experiencia en la gestión pública y cuadros políticos. Un dirigente del Apra es un cuadro político”, indicó en declaraciones a la Agencia Andina.
Según Omar Quesada, el APRA necesita una renovación de cuadros y actualización programática para hacerle frente a tanto aventurero que han hecho de la política un comercio y para enriquecerse.
Pero, contrariamente a esa postura el parlamentario aprista Jorge del Castillo, manifestó que la renovación de su partido no necesariamente depende de la edad, sino la capacidad que puedan tener para el manejo político.
“No hay apristas de la ‘vieja guardia’, ni de la nueva guardia, sino apristas en guardia”, resumió su explicación sobre el tema de la renovación aprista, que será el tema de fondo en el congreso partidario de APRA.
Sin embargo, también es cierto que hay un grueso sector de apristas de la nueva guardia, que se encuentran relegadas a su suerte, por la subsistencia de la élite aprista representada por la vieja guardia.
La renovación de cuadros políticos en el APRA, es evidente. El mismo expresidente Alan García Pérez, ya lo puso en agenda, tras su fracaso en las últimas elecciones presidenciales, que a su vez renunció a la presidencia de su partido.