¿Por qué confiar en el mensaje de Pedro Pablo Kuczynski?
Para muchos el mensaje presidencial de Pedro Pablo Kuczysnki, pasará desapercibido y aún tienen la confianza que el país puede dar un nuevo giro, pero eso dependerá de la toma de decisiones del Ejecutivo que en los 12 meses solamente nos decepcionó.
De acuerdo a los apuntes del editorial de El Comercio, el índice de confianza empresarial del BCR cayó 9 puntos en 12 meses. La encuesta de expectativas del crecimiento del PBI pasó de 4,2% en julio del 2016 a 2,5% en junio del 2017. No se revirtió la caída de la inversión privada (que decrece sostenidamente desde hace 14 trimestres), y la inversión pública consolidada a junio de este año era 4,7% menor a la del 2016.
Se esperaban del Gobierno políticas audaces en asuntos cardinales como la flexibilización laboral, la promoción de la minería y el manejo de conflictos sociales o la reforma judicial… pero estas no llegaron, desaprovechando la alta aprobación popular con que debutó esta administración y el repunte que tuvo post Niño costero.
De ninguna manera, se puede justificar que el estancamiento de la economía sea por factores externos como el escándalo de Lava Jato o El Niño costero, como justificó el propio presidente Pedro Pablo Kuczynki, quien en su primer año de gobierno se mostró muy timorato en sus decisiones políticas.
En este manojo de problemas que enfrenta el Gobierno tampoco se salva Fuerza Popular, el partido político que tiene mayoría absoluta en el Parlamento, en este caso hay una situación de corresponsabilidad por la dirección del país en el quinquenio 2016-2021.
Los episodios del primer año de gobierno de PPK, fue que la bancada fujimorista actuó en el sentido de confrontaciones y puso la guillotina a tres miembros del Gabinete Ministerial, lo que desestabilizó al Ejecutivo.
Como señala el editorial de El Comercio: “cada vez que un ministro de gobierno era convocado al Congreso, fue para atacarlo”, ya sea con razón o sin razón, pero objetivo era para vapulearlo y luego someter a censura.
Como no recordar las frases del ahora presidente del Congreso Luis Galarreta, “el ministro de la billetera que reparte como cancha”, al referirse al ex titular de Educación Jaime Saavedra o el “amante de la apología al terrorismo”, de Bienvenido Ramírez sobre el ministro Carlos Basombrío. Entre otros.
Si estos conatos siguen, creo nada cambiaría en segundo año de gobierno de PPK, el cambio dependerá de la actitud dialogante del Legislativo y del Ejecutivo, dejar de pensar en intereses partidarias, sino en el interés de los 30 millones de peruanos.