Testigo de «Madre Mía» recibió $ 4.500 para no acusar a Ollanta Humala
Foto: El Comercio
El testigo clave del caso Madre Mía Jorge Ávila Rivera, reveló que los operadores del ex presidente Ollanta Humala, le dieron 4,500 dólares para retractarse sobre las acusaciones contra el también líder nacionalista, por comisión de delitos de desaparición forzada de personas y homicidio, ocurrido en junio del año 1992.
“Me dieron 4.500 dólares, pero en partes”, señaló Jorge Ávila Rivera, en una entrevista al diario El Comercio, al ser consultado sobre el contenido de las transcripciones de los audios vinculados a Ollanta Humala en el caso Madre Mía.
Narró que uno de los intermediarios fue el suboficial EP en retiro Amílcar Gómez Amasifuénte, quien le habría pedido que no le eche la culpa a Ollanta Humala. La entrega del dinero se hizo el año 2006, cuando el ex mandatario se presentó por primera vez como candidato presidencial.
Durante la campaña del 2011, también le entregaron dinero, pero no precisó montos “solo me entregaron propinas a cambio de mantenerse callado”, señaló Jorge Ávila, además Amílcar Gómez, le había ofrecido por su silencio otros beneficios como protección para el estudio de sus hijos, promesa que nunca se cumplió.
Para la compra del testigo clave, Amílcar Gómez, fue acompañado por Rubén Gómez Reátegui y Cynthia Montes, esta última se convirtió en la secretaria de prensa de Palacio de Gobierno y es actual integrante del Comité Ejecutivo Nacional del Partido Nacionalista.
Las revelaciones de Jorge Ávila Rivera, coinciden con la trascripción de los audios vinculados a Ollanta Humala, en el que se advierte la compra de testigo clave en caso de Madre Mía, pero que fue negada por el ex mandatario, responsabilizando del chuponeo telefónico al ex presidente Alan García.
ANTECEDENTES
En agosto del 2006, la denuncia contra Ollanta Humala, fue tramitada al Cuarto Juzgado Supraprovincial de Lima a cargo de la jueza Miluska Cano, por comisión de los delitos de desaparición forzada de personas y homicidio en agravio de los esposos Natividad Ávila Rivera (hermana) y Benigno Sullca Castro (cuñado).
Además, se incluye los delitos de tortura y tentativa de asesinato de Jorge Ávila Rivera. Los hechos materia de la denuncia ocurrieron el 17 de junio de 1992, en Aucayacu, en la provincia de Tocache.
Los esposos Natividad Ávila y Benigno Sullca fueron sacados por la fuerza de su casa, en presencia de sus cinco hijos, por soldados de la Base Militar Madre Mía, entonces comandada por el «capitán Carlos», seudónimo del oficial Ollanta Humala Tasso.
En esa oportunidad Jorge Ávila Rivera, quien también fue víctima de tortura y que escapara el día que lo iban a ejecutar, estaba dispuesto a no perdonar a Ollanta Humala y declarar en su contra, pero de pronto cambio su versión, eso motivó que la denuncia se archivara.
En el 2011, la Corte Suprema reabrió el juicio por la compra de testigos en caso Madre Mía, luego que Rubén Gómez Reátegui, admitiera la entrega de dinero para callar a Jorge Ávila.
El juez anticorrupción Jorge Barreto, ya había abierto proceso en el 2007 a Ávila Rivera por supuestamente recibir US$ 4 mil a fin de cambiar su acusación contra Ollanta Humala.
El magistrado también abrió proceso con mandato de detención contra Rubén Gómez Reátegui y dispuso la comparecencia de Amílcar Gómez Amasifuén, quienes supuestamente proporcionaron el dinero a Ávila. A los tres se les acusó el delito de cohecho activo y corrupción.