Revolución y e-volución “cripto”: se agranda la familia
Las ya célebres “criptomonedas” se afirman con fuerza en el mundo y aunque muchos duden todavía de su legitimidad y de su futuro (incluyendo voces muy autorizadas), siguen su rumbo y parecen estar destinadas a cambiar para siempre nuestra percepción del dinero.
Ahora se habla de “Cripto assets” o “Cripto activos”, para señalar que no solo hay “monedas” virtuales, sino también otros productos financieros que tientan a los inversores de todo calado, porque para invertir en esta clase de bienes no son necesarias grandes sumas.
Los “Cripto ETF”: Nace una estrella
Ya sabíamos que los “NFTs”, Token No Fungibles, están revolucionando el mercado del arte, porque representan una forma de darle legitimidad a lo que antes era imposible de legitimar, como el arte “digital”, porque su propia naturaleza hacía que cada obra pudiera ser reproducida indefinidamente; si se transforma en un NFT, hay una especie de “certificado de originalidad” instalado en las Redes de Blockchain y por lo tanto tan inmutable como fácilmente transmisible.
Ahora es el turno de los “ETF cripto”. Veamos: los ETF (Exchange Traded Fund) no son nuevos. Se trata de fondos “cotizados”, un conjunto de activos que sigue la evolución de un determinado índice bursátil y da la misma rentabilidad.
Los ETFs son la entrada a carteras de acciones, bonos y otros activos (materias primas o bienes inmobiliarios también) La participación en ellos puede comprarse y venderse en bolsa.
Entonces, los ETFs combinan las ventajas de las acciones (liquidez) con la de los fondos de inversión (diversificación). Son un clásico, que da un poco más de solidez que la mera compra y venta de acciones y títulos, que a veces semeja lo azaroso (pero apasionante) de un casino online.
Lo nuevo del mercado
Tenemos ETFs de Cripto monedas, que comienzan a ser transados por los operadores tradicionales, que ven cada vez más difícil resistirse a los cripto activos y sus ganancias exorbitantes.
Los hay de dos tipos: El primero está respaldado por criptomonedas “físicas” (si se puede hablar de tal cosa). La empresa que administra el fondo compra criptomonedas y representa su propiedad como acciones.
Al comprar acciones del ETF, los inversores se transforman en propietarios indirectos de esos criptoactivos; pueden invertir en ellas con menor gasto y menos riesgo que si las compraran directamente.
Otro tipo de ETF de criptomonedas rastrea derivados de cripto: productos negociados en bolsas de criptomonedas (ETP, ya hablaremos de ellos) o contratos de futuros. Algunos de estos ETF siguen los precios de contratos de futuros de Bitcoin negociados en las Bolsas del mundo.
Por ahora hay una sonora resistencia de las autoridades regulatorias (especialmente de la SEC, de EE.UU) para darles un marco legal, lo que da argumentos a quienes consideran esta modalidad no más que como un juego de casino online. Pero sabemos lo que pasa: la legislación va muy por detras de los usos de la gente, que a la vez está detrás de la evolución tecnológica.